martes, 28 de junio de 2011

Narcotrafico

En jurisdicciones donde la legislación restringe o prohíbe la venta de ciertas drogas populares, es común que se desarrolle un mercado ilegal. Por ejemplo, el Congreso de los Estados Unidos ha identificado varias sustancias controladas.
La mayoría de las naciones considera al tráfico de droga un problema muy serio. En 1989, los Estados Unidos intervinieron en Panamá con el pretexto de romper el comercio de droga. El gobierno de la India ha realizado operaciones encubiertas en el Medio Este y el subcontinente indio para seguir el rastro de varios narcotraficantes. Algunas estimaciones del comercio global pusieron el valor de las drogas ilegales a alrededor de US$400 mil millones en el año 2000; que, sumado al mismo tiempo al valor del comercio global de drogas legales, corresponde a una cantidad superior al dinero gastado para la comida en el mismo período. En el 2005 el "United Nations World Drug Report" informó el valor del mercado de droga ilícito global durante el año 2003 se estimó a US$13 mil millones al nivel de producción, a US$94 mil millones al nivel precio de mayoreo, y a billón de US$322 basado en los precios del menudeo y cogida tomando tamaños y otras pérdidas en la cuenta.
Los mayores países consumidores incluyen a los Estados Unidos y a las naciones europeas, aunque el consumo es mundial. Los mayores países productores incluyen a India (el opio) y a Colombia y a Perú (principalmente cocaína la cual disminuye en los últimos años; vea debajo para los detalles extensos).
En algunos países, el tráfico ilícito de drogas ha sido motivo de formación y fortalecimiento de grupos armados al margen de la ley, corrupción estatal, desplazamiento forzado de población, deterioro de regiones rurales, entre otros.
La Primera Guerra del Opio era un esfuerzo por obligar a China a permitir a los comerciantes británicos comerciar opio entre la población general de China. Aunque era ilegal por decreto imperial, fumar opio era común en el siglo XIX y se creía que curaba muchos problemas de salud. Los chinos llevaron el opio a México entrando por el puerto de Mazatlán, rápidamente se dieron cuenta que las condiciones climáticas de Sinaloa permitía el buen cultivo de esta planta; así fue como inició las primeras rutas de narcotráfico hacia los Estados Unidos por el territorio mexicano donde nazis alemanes descubrieron dichos caminos de tráfico de drogas de los chinos.[1]
Colombia es quizás el ejemplo más notorio del deterioro al que puede llegar un país a causa del narcotráfico. Políticamente, este país tocó fondo cuando el reconocido narcotráficante Pablo Escobar Gaviria hizo parte del Congreso de la República.
Con el fin de los principales Carteles Colombianos, el negocio del narcotráfico se atomizó. Actualmente los protagonistas de esta historia son bandas discretas, que operan en alianzas mucho menos suntuosas pero que hacen parte de una red mucho más extendida.

[editar] El comercio ilegal de drogas legales

Las drogas legales como el tabaco y el alcohol pueden convertirse en mercancía de contrabando y comercio ilegal si la diferencia del precio entre el origen y el destino es lo suficientemente alto para hacerlo lucrativo. Con los impuestos en el tabaco, (mucho más altos en el Reino Unido que en resto de Europa) éste es un problema considerable en el Reino Unido. También suele ser ilegal vender o proporcionar tabaco o alcohol a menores, lo cual es considerado como contrabando en la mayoría de los países. si

FELIPE CALDERON HINOJOSA

Fue Secretario Nacional de Acción Juvenil, Secretario de Estudios y Secretario General del Partido Acción Nacional. Entre 1996 y 1999 fue Presidente del Comité Ejecutivo Nacional, órgano ejecutivo del PAN. Durante su gestión, su partido ganó las gubernaturas de Nuevo León, Querétaro y Aguascalientes, así como 14 capitales de estado, entre ellas Monterrey.
Fue representante por mayoría en la Asamblea del Distrito Federal y diputado federal por representación proporcional (diputado de partido o plurinominal) en dos ocasiones.
En 1987 Felipe Calderón fue Secretario de Estudios del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PAN que presidía Luis H. Álvarez.
En 1988, a los 26 años de edad, contendió por su partido como candidato a la Asamblea de Representantes -diputado local- del Distrito Federal y ganó una curul de mayoría relativa, hasta antes de su victoria en las elecciones presidenciales, ésta había sido la única vez que había triunfado en una votación para un cargo de elección popular, ya que, hasta ese entonces, sólo había sido candidato por representación proporcional (diputado de partido). Al término de su periodo como Asambleísta, fue Diputado Federal de 1991 a 1994, tiempo durante el cual ocupó la Secretaría de la Comisión de Comercio de la Cámara de Diputados y participó en las negociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte.
Felipe Calderón como Diputado Federal, con Diego Fernández de Cevallos y Enrique Caballero Peraza
  • En 1993, poco antes de concluir su periodo como Diputado Federal, fue electo Secretario General de su Partido, cuando Carlos Castillo Peraza era el Presidente del Comité Ejecutivo Nacional (CEN). Durante ese periodo, Calderón Hinojosa, también fue representante del PAN ante el Consejo General del Instituto Federal Electoral, cargo que dejó en 1995.
  • Tras concluir su periodo como legislador federal, se postuló en 1995 como candidato a gobernador de Michoacán, su estado natal, entidad donde el panismo aún no contaba con una presencia electoral importante. No obtuvo la gubernatura, pero aumentó la votación a favor de su partido (25%) en las Elecciones.
  • Posteriormente, fue electo Presidente del Comité Ejecutivo Nacional de su Partido, para el periodo 1996-1999.
  • Fue coordinador de la fracción parlamentaria del PAN en la Cámara de Diputados durante la 58 legislatura.
  • En el año 2003, se incorporó al banco estatal Banobras y posteriormente al gabinete del presidente Vicente Fox como Secretario de Energía, cargo del que renunciaría poco tiempo después, luego de supuestas presiones del presidente cuando se auto-postuló para la candidatura a la Presidencia por su partido.
Entre sus participaciones en organismos de política internacional, se cuenta su participación en el grupo: "Líderes Mundiales del Futuro” del Foro Mundial, del cual es miembro desde 1997, así como la Internacional Demócrata Cristiana (IDC), de la cual es vicepresidente desde 1998.

Candidato a la presidencia

Felipe Calderón y Luiz Inácio Lula da Silva, expresidente de Brasil.
Felipe Calderón fue electo candidato del Partido Acción Nacional en una elección interna a finales de 2005. En ellas derrotó al Ex Secretario de Gobernación, Santiago Creel, y el ex-Gobernador de Jalisco, Alberto Cárdenas Jiménez, con un muy amplio margen.
Calderón aceptó la nominación de su partido el 4 de diciembre de 2005, y comenzó oficialmente su campaña en enero de 2006.

Campaña proselitista

VICENTE FOX QUESEDA

Vicente Fox asumió la presidencia con uno de los índices de popularidad más altos en la historia reciente de México. Sin embargo, muy pronto su popularidad se fue minando, principalmente por desacuerdos en torno al cambio que significaba su presidencia, siendo criticado por la oposición por supuestos actos irresponsables de su parte.[cita requerida]
Aconsejado por su Secretario de Hacienda, Francisco Gil Díaz promovió una reforma fiscal que contemplaba gravar con el impuesto al valor agregado el consumo de alimentos, medicinas, colegiaturas de escuelas privadas, libros y revistas, (entre otros), pero la reforma fue rechazada. Esta reforma fue polémica, pues había especialistas a favor y en contra.
El 2 de julio de 2001, justo al cumplirse un año de su última victoria electoral y un aniversario más de su nacimiento, Vicente Fox contrajo segundas nupcias por la vía civil con su ex portavoz, la Sra. Marta Sahagún Jiménez, una antigua colaboradora en Guanajuato que acababa de recibir la nulidad de su primer matrimonio en el año 2000.

[editar] Conflicto por el proyecto del aeropuerto de Texcoco

Desde el inicio de su mandato Vicente Fox se había comprometido a mejorar la infraestructura de México con la construcción de un nuevo aeropuerto en la zona metropolitana de la Ciudad de México, los gobiernos de Hidalgo y del Estado de México solicitaron la obra. Después de varios estudios de factibilidad el 22 de octubre del 2001 se determinó que la obra sería realizada en terrenos del lago de Texcoco. Para lograr esta obra fue emitido un decreto presidencial que expropiaba 4 mil 550 hectáreas, pertenecientes a ejidatarios, por las que se pagarían 7 pesos por metro cuadrado. Campesinos afectados hicieron varias protestas, el 2 de noviembre de 2001, los ejidatarios de San Salvador Atenco iniciaron los trámites legales, impugnando ante los tribunales federales el decreto expropiatorio.
En diciembre de 2001 campesinos de San Salvador Atenco colocaron barricadas en los accesos principales a sus tierras para impedir la entrada de policías o maquinaria. Las protestas continuaron en diferentes zonas de la Ciudad de México durante varios meses y la molestia de los campesinos iba en aumento. [6]
Finalmente debido a la gran inconformidad de los campesinos el 1 de agosto de 2002 la Presidencia de la República decidió cancelar el proyecto en Texcoco del nuevo aeropuerto de la Ciudad de México. [7] [8]

[editar] Creación de la AFI

El primero de noviembre del 2001, por decreto es creada la AFI agencia la cual se encarga de combatir delitos federales como el secuestro, tráfico de drogas, la delincuencia organizada así como los delitos electorales, el decreto establecía dicha institución como parte operativa de la PGR.
Durante los primeros meses del 2005, se vio envuelto en un disturbio legal y político relacionado con el desafuero (pérdida de inmunidad política) del jefe de gobierno de la capital del país: Andrés Manuel López Obrador, quien acusó al presidente de confabularse en su contra. Días después, llegó a un acuerdo con Vicente Fox, mediante el cual la PGR no ejercería acción penal contra él. Esto provocó la renuncia del General Rafael Macedo de la Concha a la dirigencia de esa institución. Dicho acuerdo fue criticado por el Presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Mariano Azuela.
Otro conflicto en que se vio envuelto fue el tráfico de influencias de los Bribiesca,[9] (hijos de Marta Sahagún) de acuerdo a declaraciones de la diputada del PRD Martha Lucía Mícher Camarena quien en octubre de 2005, aseguró que los Bribiesca se beneficiaron con $42 millones de pesos por comisiones y negocios con organismos del gobierno. [10]

[editar] Política exterior

Con George W. Bush
Las relaciones con Estados Unidos llegaron a un momento de tensión debido a que el Gobierno de Vicente Fox manifestó su rechazo a la guerra de Irak de manera oficial en el Consejo de Seguridad en la ONU, en momentos en que México buscaba el apoyo del presidente Bush para un acuerdo migratorio. [11] [12].
Durante su campaña electoral Fox planteaba convertir a México en una nación líder y activa en asuntos hemisféricos - "Creo que con la madurez que hoy tenemos, debemos salir al mundo a participar en lo que sucede, nos guste o no nos guste, así sea favorable o no. Tenemos que ser un actor claro en la participación en el mundo entero" -.
El primer enfrentamiento político de carácter internacional ocurrió con Cuba a raíz de la visita del líder cubano a México con ocasión de la Cumbre de la Organización de Naciones Unidas sobre el Financiamiento al Desarrollo celebrada en Monterrey en marzo del año 2002, en la que Vicente Fox invitó salir del país a Fidel Castro para darle su lugar al Presidente de Estados Unidos George Bush, haciendo célebre la frase de "Comes y te vas".
En noviembre de 2005, Fox criticó junto con Alejandro Toledo de Perú a miembros del Mercosur (Argentina, Paraguay y Uruguay), que junto con Venezuela no están de acuerdo en crear el ALCA. El sentimiento en los países mencionados es que hay aspectos que no les benefician (particulalrmente los subsidios agrícolas en Estados Unidos). Esto ocasionó un enfrentamiento. La defensa categórica del ALCA hecha por Fox durante la cumbre también sorprendió a muchos analistas políticos mexicanos y de Latinoamérica debido a que el ALCA no figura entre las prioridades de la política exterior mexicana, pues México ya tiene un amplio TLC con los Estados Unidos. Las retórica de Vicente Fox, en esta cumbre generó un intercambio de declaraciones amargas por parte del gobierno de Argentina, quién se quejó de que Vicente Fox había asumido posturas intervencionistas cuando criticó a su presidente, Néstor Kirchner, de hacer demasiado caso a la opinión pública argentina.
El alejamiento de México con América Latina también se ha puesto en evidencia tras diversos desencuentros con otros países de la región, coincidentemente todos con gobiernos de tendencia de izquierda; pero elegidos democráticamente en las urnas, como es el caso de Brasil, con quién se tenía firmado un acuerdo de amistad y cooperación que incluía la dispensa reciproca de visas. El acuerdo fue roto unilateralmente, por el gobierno de Vicente Fox en el 2005 y se pasó a exigir visas a ciudadanos de este país y de Ecuador [13].Finalmente, Vicente Fox hizo referencia a Bolivia de manera despectiva al comentar el estado de los intercambios comerciales de gas natural con la nación que, recientemente, había elegido a Evo Morales como su presidente, declarando "que se coman su gas" [14]. Contrario a la costumbre que impone la importancia de México en la región, Vicente Fox no acudió, pese a estar invitado, a la toma de posesión de los gobiernos recientemente electos en Uruguay, Bolivia y Chile. En el caso de Bolivia, Fox dijo que no iba debido a un compromiso anterior.

ERENESTO SEDILLO

Asumió la presidencia el 1 de diciembre de 1994, rindiendo protesta ante el Congreso de la Unión presidido por la diputada Carlota Vargas Garza. La presidencia de Ernesto Zedillo estuvo marcada por una de las crisis financieras del siglo con repercusiones internacionales llamada Efecto Tequila. Zedillo y Salinas se culparon mutuamente de la crisis. Carlos Salinas, responsabilizó al llamado error de diciembre, en diciembre de 1994, que fue la táctica de libre flotación de la paridad peso-dólar, la cual había estado controlada en el sexenio de Salinas. La libre flotación causó una fuga masiva de divisas ante la situación política del país: además del levantamiento del Ejército Zapatista de Liberación Nacional, asesinato de Colosio, problemas financieros, etc.
El precio del dólar incrementó cerca del 114% (de $3.40 a $8.70) entre diciembre de 1994 y marzo de 1995 - el punto más álgido de la crisis-. Inmediatamente, causando quiebras de miles de compañías, desempleo y que muchos deudores se vieran impedidos de pagar sus deudas. El gobierno de Zedillo ideó el Fondo Bancario de Protección al Ahorro,[1] para apoyar a la banca nacional contra los deudores.
Ernesto Zedillo resolvió el problema por medio de dos préstamos hechos por los Estados Unidos a México , por un total de $20 mil mdd. logrando que el resto del sexenio de Zedillo vio una recuperación del empleo y una sana administración de la economía mexicana al parecer por los cambios en el sistema económico que permitieron estabilidad económica relativa en el sexenio siguiente. En el terreno político inició y dio los primeros pasos a la democracia ejemplificando Por otra parte, la oposición logró ganar por primera vez las gubernaturas de varios estados y convertirse en mayoría en el Congreso. Asimismo favoreció unas elecciones competidas en el año 2000, que permitieron por primera vez en 70 años el arribo a la presidencia de un candidato no emanado del Partido Revolucionario Institucional

CARLOS SALINAS DE GORTARI

Reducción de la deuda
En 1982 el pago anual por pago de intereses de la deuda externa era de 14 000 millones de dólares, entre 1983 y 1988 se destinó casi el 7% de PIB para su pago, el monto de lo destinado era casi el equivalente a lo destinado en salud y educación para todo el país, para inicio del sexenio de Salinas el monto de la deuda era del 45% del PIB. Lo cual hacia necesario una reducción de esta deuda para lograr un crecimiento económico. Después de casi 4 años de largas negociaciones con el FMI, políticos de Estados Unidos, mandatarios de países como Francia, Alemania, Canadá, Japón, Gran Bretaña, otros países y con bancos comerciales en 1992 se llegó a un acuerdo y se logró una reducción de más de 7000 millones de dólares, debido a este logro la deuda se disminuyó a 20 000 millones de dólares. Con esto se logró que la deuda total (externa e interna) pasara de 63% del PIB en 1988 a 22% en 1994 y los pagos de intereses pasaron de 17% del PIB a 9.8% en 1994.[8]

[editar] Liberalismo social

El sexenio de Carlos Salinas marcó un claro parteaguas respecto de las gestiones priístas previas, especialmente las de Luis Echeverría Álvarez y José López Portillo en la medida que rompió con el discurso y la ideología del nacionalismo revolucionario que todavía con Miguel de la Madrid trató de presentarse como el soporte ideológico del priísmo.
Salinas, en cambio, adelantó una serie de tesis que él mismo englobó bajo la categoría de "liberalismo social" que buscaba recuperar lo mejor de las tradiciones ideológicas del liberalismo juarista del siglo XIX y de la Revolución Mexicana del siglo XX. En este sentido, Salinas pronunció una serie de discursos durante 1991 y 1992 que sirvieron de soporte para impulsar algunas de sus más ambiciosas reformas. En un sentido, la que puso punto final a la reforma agraria, concebida ya desde tiempos de Echeverría más como un instrumento de control social que como uno de efectiva solución de problemas en el agro mexicano. Formó parte de esa ofensiva ideológica también la iniciativa para reformar las relaciones del Estado con las iglesias, especialmente la católica, aunque en este punto es donde es posible observar mayores tensiones entre la recuperación del juarismo propuesta por Salinas y las políticas desarrolladas por su gobierno.
Salinas se inspiró para articular su propio concepto de "liberalismo social" en los trabajos de Jesús Reyes Heroles, Otto Granados Roldán (director de Comunicación Social durante los primeros años de su gestión) y José Francisco Ruiz Massieu (quien jugó un papel clave en la reforma de la relaciones Iglesia-Estado).

[editar] Privatizaciones

Hacía 1984, el gobierno federal era propietario u operaba poco más de 1150 empresas de todo tipo, desde cadenas y productoras de cine y televisión, hoteles, inmobiliarias, mineras, ingenios azucareros, automotrices, siderúrgicas, pesqueras, transbordadores, e incluso el conocido centro nocturno El Patio de la ciudad de México, también fue el caso de la Siderúrgica Lázaro Cárdenas-Las Truchas, Petróleos Mexicanos o Comisión Federal de Electricidad.
La crisis de 1982 obligó al gobierno federal a nacionalizar la banca, con lo que la participación del Estado en la economía creció todavía más. En otros casos, sin embargo, el gobierno, lo mismo el federal que el del Distrito Federal y los de los estados, se convirtió en dueño de empresas como medida para evitar la quiebra de empresas privadas que se consideraba jugaban un papel importante para la economía del país o que simplemente empleaban a un número importante de personas.
Esta dinámica se vio favorecida por dos procesos. En un sentido, por la sobrevaluación del peso mexicano que ocurrió ya durante los últimos años del gobierno de Gustavo Díaz Ordaz y de manera más clara durante los primeros años del gobierno de Echeverría, quien expandió el control del Estado sobre la economía al hacerse cargo de Teléfonos de México. La sobrevaluación hacía que las mercancías mexicanas fueran más caras que las que se producían en otros países. No sólo eso, gracias a las políticas de industrialización seguidas desde el gobierno de Lázaro Cárdenas (con un alto componente de protección a la industria nacional), las empresas mexicanas habían perdido calidad y eficacia.
Esta dinámica estuvo a punto de romperse con la decisión de Echeverría de devaluar el peso justo antes de que terminara su gestión en 1976. Sin embargo, su sucesor, López Portillo decidió utilizar los recién descubiertos excedentes petroleros para mantener intocadas las políticas industriales y comerciales que había heredado de sus predecesores.
Todas estas empresas operaban con déficit por lo que se mantenían gracias a una inyección constante de fondos públicos obtenido por medio de deuda, excedente petrolero o, en los peores momentos del periodo 1970-1982, por medio de la emisión de billetes y monedas sin sustento. Ello hizo que para 1982, el déficit público primario fuera de más del diez por ciento del Producto Interno Bruto. Cerca de un 70 por ciento de este déficit provenía del sector paraestatal.[9]
Con los ingresos de las privatizaciones se obtuvo casi el equivalente a 23 000 millones de dólares,[10] los cuales fueron utilizados para amortizar la deuda pública interna. Con estos recursos se logró una disminución de la deuda interna, en 1988 era del 19% y para 1994 fue del 6%.[11] Dando como resultado una disminución de los pagos de intereses y logrando un crecimiento en el gasto social.

[editar] Privatización de Telmex

En 1990, Telmex era una empresa con varias décadas funcionando y con solo 16 años de pertenecer al sector público, el servicio prestado por la empresa era motivo de frecuentes disputas como se puede observar en la cantidad de demandas que la empresa enfrentaba en la Procuraduría de la Defensa del Consumidor, así como por los tiempos de espera, en ocasiones de más de 10 meses, para conseguir una línea. En los primeros años de la administración Salinas de cada 10 hogares 8 no tenían teléfono y había hasta un millón de solicitudes pendientes. La gestión pública de Teléfonos de México, además, estaba plagada de dudas y sospechas acerca de la transparencia en el manejo de los recursos
La venta fue hecha a través de una subasta publica. A pesar de que varios grupos extranjeros ofrecieron cantidades mayores para la compra de Telmex, uno de los requerimientos determinantes era que la propiedad mayoritaria quedara en manos mexicanas, es por eso que de los grupos con control accionario mexicano, la mayor fue la que encabezaba el Grupo Carso, propiedad del empresario Carlos Slim, por lo que éste fue declarado ganador.
Con motivo de esta privatización se inició la modernización de la telefonía en México. En los siguientes años el número de poblaciones rurales atendidas pasó de 6350 a 21 263; los teléfonos públicos llegaron a más de 200 000 en todo y se inició la instalación de una red de fibra óptica que ahora cubre las ciudades más importantes del país.[12]

MIGUEL DE LA MADRID

El 19 de septiembre de 1985, un terremoto de 8.5 grados en la escala de Richter sacudió la Ciudad de México, con una fuerte réplica el día 20. Los daños materiales fueron masivos, y aunque los cálculos oficiales hablan de unos pocos miles de muertos (5 a 10 mil), la opinión pública consideró que la cifra podría haber rebasado los 40,000. La reacción inicial del gobierno fue muy lenta e inadecuada, lo cual hizo que fuera la población la que tomara el liderazgo y la organización de las labores de rescate de víctimas y cuerpos de entre los escombros. Tanto las declaraciones del Presidente De la Madrid señalando que el país no requería ayuda extranjera para enfrentar la tragedia, como su decisión de no permitir que el Ejército colaborara con la población en las labores de rescate durante las primeras horas posteriores al terremoto le valieron severas críticas a esta administración
En 1988 su gobierno protagonizó el mayor escándalo electoral del país. El 3 de julio, durante las elecciones presidenciales, el candidato de la izquierda Cuauhtémoc Cárdenas, aventajaba ampliamente a sus rivales Manuel Clouthier (PAN) y Carlos Salinas de Gortari (PRI). Por motivos que aún "se desconocen", el sistema electoral de cómputo se detuvo. La secretaría de Gobernación, que entonces organizaba la elección, señaló que: el sistema se había caído. Finalmente, el candidato priísta fue declarado ganador.
De la Madrid llegó al poder en una de las épocas más difíciles del país, mucho debido a su antecesor José López Portillo, quien nacionalizó la banca tres meses antes de salir del poder tras dos sexenios de gastos excesivos. Como resultado, la inflación subió a un promedio de 100% cada año, el empleo informal creció a 20% entre 1983 y 1985 y hubo caídas drásticas en producción, sobre todo en industrias gubernamentales, ya para ahí entonces anticuadas, crecimiento del PIB fue erróneo con altibajas y disminuyó el poder adquisitivo. Para resolver tales problemas, emprendió la Renovación Moral de la sociedad, elaboró un Plan Global de Desarrollo, estableció a nivel constitucional un sistema de planeación democrática y más importante, inició con la apertura económica, la desregulación y descentralización así como la privatización de empresas estatales, algo que seguiría bajo su sucesor; durante su administración, el número de paraestatales se redujo de 1155 en 1982 a 413 en 1988. Ante la severa crisis económica (donde se alcanzó el 3,100 por ciento de devaluación del peso), se establecieron los Pactos de Crecimiento Económico con los diversos sectores sociales, mediante los cuales el gobierno subsidiaba parte de los precios de los productos básicos y los productores/distribuidores se comprometían a no aumentarlos. En Enero de 1986, aprox. 3 años de negociaciones, México logra ser admitido al GATT, siendo el punto más fuerte de esta administración

JOSE LOPEZ PORTILLO

               Rodeado de la polarización y el desorden legados por la administración de Luis Echeverría, el 1 de diciembre de 1976 José López Portillo tomó posesión como presidente de México y pronunció un impecable discurso que le ganó apoyos y confianza por su interés conciliatorio y el abandono de la retórica demagógica y grandilocuente que primó en todo el sexenio anterior. Su proyecto de gobierno se dividía en tres partes: dos años de recuperación, dos de consolidación y dos de crecimiento acelerado, y para lograrlo urgía a superar las discrepancias y avanzar: "Hagamos una tregua inteligente para recuperar nuestra serenidad y no perder el rumbo [...] podemos hacer de nuestra patria un infierno o un país donde la vida sea buena". Enseguida, pidió un emocionado perdón a los desposeídos y marginados por el fracaso del Estado en acertar a "sacarlos de su postración", lo que expresó cambiaría en su gobierno, bordando así un momento memorable dentro del devenir político contemporáneo.
Empero, los primeros tiempos se enrarecieron por los rumores sobre el activismo del ex presidente Echeverría (recogidos y amplificados por Reyes Heroles, quien sostenía una sabida rivalidad con el anterior titular del Ejecutivo), pues mediante su Centro de Estudios Económicos y Sociales del Tercer Mundo y la presencia de estrechos colaboradores impuestos en el gabinete entrante y en el Poder Legislativo buscaba seguir influyendo en los ámbitos de decisión con una agenda propia, violando otra pauta básica del predominio presidencial de la época, misma que exigía de los mandatarios en retiro su desapego sin cortapisas de la política nacional, lo cual llevó a López Portillo a prescindir de ciertos personajes (los casos más evidentes fueron el de Porfirio Muñoz Ledo en la cartera de Educación y el del presidente del Congreso, Augusto Gómez Villanueva), a encarcelar a funcionarios de aquel periodo (como Eugenio Méndez Docurro y Félix Barra García, ex secretarios de Comunicaciones y Transportes y de la Reforma Agraria respectivamente, así como al ex director del Fideicomiso Bahía de Banderas, Alfredo Ríos Camarena, y al del Instituto Mexicano del Café, Fausto Cantú Peña), y a enviar fuera al mismo Echeverría como embajador en la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) en 1977 y en 1978 ante la apartada Australia, con concurrencia en Nueva Zelandia y las Islas Fiji, aniquilando así cualquier intromisión en su gobierno.[3]
En lo financiero, la situación era difícil en general, dado que apenas unos días antes de entrar en funciones se realizó una de las devaluaciones más severas que el país hubiese vivido hasta esas fechas y se obtuvo un préstamo del Fondo Monetario Internacional con el acuerdo de ejercer un presupuesto reducido y mantener bajos los salarios. Constreñido por los malos manejos de su antecesor y ante aquellas disposiciones, López Portillo se mostró prudente en cuanto a gasto e inversiones se refería, pero todo cambiaría cuando, como secuela de la Guerra del Yom Kipur, los países árabes interrumpieron la venta de petróleo a Estados Unidos y a Europa Occidental por el apoyo brindado a Israel. Esto, junto al descubrimiento de nuevos yacimientos en Chiapas, Tabasco y de la rica Sonda de Campeche catapultó a México como primer exportador de crudo, lo que permitió que el Producto Interno Bruto se elevara a un 8% anual y que la tasa de desempleo se redujera en un 50%. "México, país de contrastes, ha estado acostumbrado a administrar carencias y crisis. Ahora [con] el petróleo en el otro extremo, tenemos que acostumbrarnos a administrar la abundancia",[4] fue el reto y promesa a la vez que el presidente acuñó e hizo patente a la sociedad ante la inesperada jauja, aderezando las buenas nuevas con una perla del egocentrismo que le embargaría sin remedio: "Soy la última oportunidad de la Revolución".